Dicen que una imagen vale más que mil palabras. De ser cierto, el nuevo libro de Joseph Buchdahl, Monte Carlo or Bust: Simple Simulations for Aspiring Sports Bettors, vale un millón. El autor de Squares & Sharps, Suckers & Sharks continúa su trabajo con una guía integral sobre cómo lograr que la aleatoriedad juegue a nuestro favor y no en nuestra contra.
En los libros y artículos anteriores que escribió para el blog de recursos de apuestas de Pinnacle, Buchdahl presentó varios montajes matemáticos para analizar desde la confiabilidad de los informantes hasta cuál es el monto ideal a apostar. En este libro, nos muestra de forma bastante gráfica cómo funcionan la aleatoriedad y la varianza para que sepamos qué esperar en muchos escenarios comunes en las apuestas deportivas y aprendamos a usar estos elementos para hacer pronósticos valiosos.
Si bien hay mucha matemática para desmenuzar, él la utiliza con gran habilidad para brindar evidencia en etapas, tal como hace un fiscal al presentar un caso contra un informante deshonesto. Lo primero que nos dicen las matemáticas y la simulación de Montecarlo es cómo debería ser el mundo, y luego nos muestra si los sucesos y afirmaciones son o no lo que esperamos. Cuando Joseph nos muestra imágenes, incluso quienes tienen dificultades con la matemática (o les resulta imposible de entender) logran captar el punto.
Buchdahl comienza este proceso de forma gradual y explica por qué el título de su libro lleva la palabra Monte Carlo con un poco de contexto, además de explicar por qué las simulaciones aleatorias que usa también llevan ese nombre. Esto se debe a que el gran casino que allí se ubica tiene muy buena fama entre quienes disfrutan de ostentar y muy mala fama por la racha de 26 ganadores consecutivos que hubo en la ruleta con el color negro hace más de 100 años. Es una excelente metáfora para el siguiente análisis estadístico, para el cual debemos estar bien preparados.
Principios y fórmulas necesarias
En el segundo capítulo, hemos incorporado los principios y fórmulas básicas que necesitaremos para calcular las probabilidades de muchos aspectos clave en las apuestas deportivas. No solo debemos prestar atención a la frecuencia con la que los equipos ganarán, sino también a la frecuencia con la que le ganaremos a las cuotas (o cuotas decimales, para ser exacto). Más allá de eso, debemos saber no solo los resultados promedio, sino también la varianza que rodea dicho promedio, ya que el 50 % de nosotros estará por debajo de él. Para encontrar las respuestas correctas, él entrena a sus lectores con la distribución binomial, normal y lognormal junto con una representación visual de lo que significa cada una de ellas.
A medida que profundiza en el material, Joseph nos muestra las ecuaciones que necesitamos para responder preguntas simples y nos brinda instrucciones paso a paso para crear una simulación en Excel y responder preguntas más complejas. Deberá hacer los deberes si quiere reproducir los resultados de Buchdahl (que le muestran cómo es ganar y perder) en las turbulentas aguas de las apuestas deportivas.
Sin embargo, al darnos las herramientas para investigar por nuestra cuenta, Buchdahl nos brinda algo que muy pocas otras casas de apuestas nos ofrecen. No solo nos enseña a pescar, sino que también nos brinda un plan de acción para construir la caña de pescar y el carrete, y nos muestra cómo interpretar nuestros propios resultados. ¿Solo sacó dos peces hoy? Quizás eso es lo que se espera cada 31 días. O quizás no sea un buen pescador.
Ganar
En defensa de la hipótesis del valor de la línea final (VLF), Joseph presenta una gran cantidad de evidencia (proveniente de años de analizar datos de forma meticulosa) con la que demuestra que el promedio de la línea de cierre de los mercados de apuestas eficaces es como un dispositivo sonar que describe cuándo estamos pescando en aguas fértiles y cuándo no. En el capítulo denominado «Winning» (ganar), afirma lo siguiente: «Ya expliqué que la precisión de un precio (o línea) depende mucho de tres factores. El primero es la calidad del modelo predictivo de las casas de apuestas y su predisposición a reflejar las probabilidades «reales» en sus cuotas y líneas. Pinnacle, tal como afirmé, tiene mucha más predisposición a hacerlo que las casas de apuestas recreativas. Esa es la razón por la que se puede lograr una ganancia con esta casa de apuestas y no con el resto cuando se las compara».
«Necesitaría miles de apuestas para obtener evidencia estadística significativa sobre la habilidad contra los márgenes de las casas de apuestas».
Aún así, usar las líneas finales de Pinnacle para encontrar valor es solo el punto de partida para obtener la ganancia máxima. Continúa con este punto utilizando las simulaciones de Montecarlo para mostrar con qué frecuencia ganaremos en función de la ventaja calculada, con qué frecuencia perderemos y cómo podemos determinar la cantidad a apostar de modo tal que nos quede carnada suficiente en la caja de pesca cuando inevitablemente baje la marea. Estas simulaciones de Montecarlo dan cuenta de que incluso una muestra pequeña del VLF no ocurre por pura suerte.
De hecho, en palabras de Buchdahl: «Sin embargo, el punto más relevante es la velocidad con la que identificamos una señal con la aleatoriedad como ruido de fondo. Por lo general, en los sistemas de apuestas con un valor esperado del 1,72 % necesitaría miles de apuestas para obtener evidencia estadística significativa sobre la habilidad contra los márgenes de las casas de apuestas. En cambio, al usar los movimientos de los precios logré obtener este resultado con tan solo 65 apuestas».
La posibilidad de perder y la mejor manera de evitarlo
A nadie le gusta pensar que va a perder, pero en su capítulo al respecto, Buchdahl nos hace analizar esta posibilidad y nos indica cuál es la mejor manera de evitarlo. Un elemento clave de este análisis (inspirado en Nassim Taleb) es que cuando los apostadores calculan su retorno sobre la inversión (o ROI, por sus siglas en inglés) a largo plazo con frecuencia están «fusionando la probabilidad combinada con la probabilidad de tiempo», ya que «no hay un "después" al quedar en la ruina». La lección a aprender aquí es que si uno queda en la ruina o le queda solo una mínima parte del dinero con el que contaba originalmente, el posible retorno de las futuras apuestas no tendrá importancia debido a la varianza inevitable.
En el capítulo denominado «Staking» (monto a apostar), Joseph compara varios métodos legítimos y algunos infundados. Se reduce a esto: cuando logramos encontrar una ventaja y un cálculo lógico de cuán grande es, ¿cuál es la mejor forma de explotarla? Joseph comienza con apuestas fijas predefinidas y luego hace algo novedoso: reinterpreta diferentes montos a apostar predefinidos, tales como unidades de pérdida y de ganancia en variantes de Kelly, para compararlos con apuestas calculadas directamente con el criterio de Kelly. Este enfoque novedoso representa una enorme ventaja en el capítulo cuando usa el concepto estadístico de «puntaje z» para confeccionar un nuevo método de apuesta denominado «unidad z» que registra toneladas de resultados de apuestas reales mucho mejor que otros métodos típicos.
«Lo único que realmente ha logrado la estrategia de la martingala es cambiar la distribución de los riesgos».
No quiero arruinarles la sorpresa en esta sección, pero puedo adelantarles que se trata de un trabajo revolucionario. En el otro extremo de la distribución de las apuestas, tenemos a la infame estrategia de la martingala. Si bien muchos apostadores habilidosos se dan cuenta de que es ridícula, puede que no logren explicar exactamente por qué. Buchdahl la desglosa y, básicamente, llega a la siguiente conclusión: «Lo único que realmente ha logrado la estrategia de la martingala es cambiar la distribución de los riesgos. El único sacrificio para lograr un resultado adicional con una expectativa positiva es otro con una expectativa negativa mucho mayor en comparación con el resultado equivalente para el monto apostado. Esta asimetría en el riesgo es la fuente del peligro inherente relacionado con la estrategia de la martingala».
En el capítulo sobre los informantes, obtenemos un análisis riguroso sobre la probabilidad de que estos proporcionen datos realmente «ganadores». Digamos que las novedades no son buenas, en especial para Fixedmatches.org, cuyos supuestos resultados son tan distintos de lo que indica el análisis de Buchdahl como de la realidad, por lo que él concluye que sus resultados probablemente sean inventados. La gota que rebalsa el vaso es que ni siquiera muestran rachas ganadoras suficientemente largas como para cuadrar con el índice de victoria que predican. Supongo que en este caso podemos concluir que no solo no son buenos informantes, sino que tampoco son muy buenos haciendo trampa.
La inferencia bayesiana
En el capítulo «Odds and Sods» (cuotas y palabrotas), Joseph nos da una breve explicación de la inferencia bayesiana, que es el método matemático utilizado para actualizar la probabilidad estimada de que algo suceda en función de los resultados recientes. Realiza una simulación de cómo este método cambia la probabilidad posterior desde puntos de partida diferentes, por ejemplo que hay un 1 %, un 10 % y un 50 % de probabilidad de que él sea un apostador habilidoso. Luego de mostrarnos la evidencia, llega a la siguiente conclusión: «Podemos ver que la evolución de mi creencia en la probabilidad de que sea un apostador habilidoso es muy susceptible a la probabilidad inicial previa. Es más, esta es una de las debilidades de la inferencia bayesiana. Llegaría mucho más rápido a la conclusión de que soy un apostador habilidoso si mi punto de partida inicial fuera una probabilidad mayor de que lo soy».
Aquí hago la salvedad sobre la afirmación de que este resultado muestra una debilidad en el método. De hecho, creo que es un punto fuerte que al comenzar con una probabilidad de apenas el 1 % de ser un apostador habilidoso en lugar de simplemente tener suerte (una cifra que muestra con una evidencia mucho más sólida más adelante), se necesita mucha más información para inclinar la balanza hacia «la mayor probabilidad» de que sea habilidoso que si creyéramos que la probabilidad inicial era del 50/50.
Otra falacia muy común en las apuestas que se encarga de desmentir en este libro es la explotación de datos o «data mining», sobre lo cual escribe lo siguiente: «La explotación de datos logra revertir el proceso de inferencia. En lugar de poner a prueba una hipótesis previa de que alguna variable o conjunto de variables podría generar un nivel particular de rentabilidad en las apuestas, se cree que un patrón de ganancias tiene una causa simplemente por haber sucedido. Si no tiene idea de lo que hay detrás de este patrón, tampoco tendrá idea de por qué desaparece en caso de que lo haga».
Este es otro caso en que los apostadores intentan tomar un atajo para encontrar una ventaja pero terminan extremadamente desilusionados cuando llegan los resultados. No obstante, la buena noticia es que cuando encontramos una ventaja real y sostenible, no es necesario que sea esta muy grande para que nos beneficiemos de ella a largo plazo, ya que Buchdahl nos dice lo siguiente: «Solo se necesita una pequeña ventaja para que la influencia del cálculo proporcione ganancias a largo plazo».
En el último capítulo, «A Cautionary Tale» (un relato de advertencia), Joseph mira el panorama completo. Habla sobre los distintos modelos de las casas de apuestas y sobre cómo podrían, y quizás hasta deberían, coexistir. Nos brinda un poco de información sobre esta abundancia de aleatoriedad en las apuestas que naturalmente causa la emoción relacionada con ella y nos explica que reconocer nuestra predisposición real a apostar será de mucha más utilidad para quienes tienen problemas con el juego que las prohibiciones o regulaciones estrictas.
No obstante, mi cita favorita de su conclusión es la siguiente: «Uno nunca puede saber si el camino que eligió en la vida es mejor o peor que el que eligió otro. Tenemos una única vida en el modelo de vida de Montecarlo, en el que puede haber un número infinito de caminos a seguir y la forma de distribución en desconocida. Como le diría a todos los apostadores, enfóquense en el proceso y no en el resultado, o como dijo Buda, "La felicidad es el viaje y no el destino"».
Puede adquirir una copia de Monte Carlo or Bust en Amazon y también seguir a Joseph en twitter, @12Xpert.