Al escuchar a nuestros clientes, hay algo que nos ha quedado muy claro: quieren saber cómo mejorar sus apuestas y quieren oírlo de boca de expertos reales. Qué mejor manera de atender esa petición que entrevistando a un apostante realmente experto que lleva seis décadas apostando con éxito y venciendo a las cuotas.
Lewis Deyong ha dedicado gran parte de su vida a refinar el arte de evaluar un buena apuesta. Es un jugador de élite de backgammon, subcampeón en el Campeonato Mundial de 1972, ha escrito libros sobre el tema, y como iniciador y organizador del Campeonato Mundial de Montecarlo, se ha codeado con los jugadores más famosos, y ha aprendido de ellos.
Su inmersión en el mundo de las apuestas y una aptitud natural para trabajar con las cuotas han servido para que algunas de las mayores casas de apuestas del mundo contrataran a Lewis como asesor para establecer sus cuotas. Mientras tanto, él sigue buscando formas de derrotar a otras casas de apuestas a las que no asesora.
Ahora que ya tiene 81 años y sigue apostando activamente con límites importantes en grandes casas de apuestas, dedica tiempo a compartir con Recursos para apostar parte de la enorme cantidad de conocimientos sobre apuestas que ha acumulado.
81 años y sigue aprendiendo
Al sentarme para hablar con un hombre que ha visto tantos cambios en el mundo de las apuestas, había infinidad de preguntas que podía plantearle y, sin embargo, nuestra conversación empezó hablando del futuro. Concretamente, sobre el inicio de los playoffs de la NFL de 2016 *.
“Me gusta Kansas City esta semana”, sus palabras fueron cuidadosas y consideradas. “Hay algunas estadísticas muy convincentes sobre equipos con una sólida defensa”.
Los Chiefs se enfrentaron a los tejanos en la ronda de wild card de los playoffs, tras clasificarse segundos en la división oeste de la AFC, y ceder menos puntos que solo otros dos equipos de toda la NFL.
Ese fin de semana no pude evitar una sonrisa irónica cuando vi que Kansas derrotó a Houston por 30-0. ¿Suerte del principiante? Esa frase nunca podría ser menos relevante.
A pesar de la experiencia adquirida en seis décadas inmerso en las apuestas deportivas, Lewis enseguida comentó que seguía buscando constantemente cualquier cosa que le pudiera ayudar a obtener una ventaja, y también comentó que anima a todos los apostantes a hacer lo mismo.
Por ejemplo, quedó impresionado con algo que leyó recientemente en el artículo El impacto del viento en los marcadores de la NFL de Mark Taylor en nuestra sección de Recursos para apostar.
“Que la velocidad del viento suba de las 20 millas por hora influye, pero a medida que la velocidad del viento sube, los marcadores bajan y los totales también”. [Hizo hincapié en ese punto recomendando encarecidamente que se compruebe el canal del tiempo de la NFL el día del encuentro antes de realizar cualquier apuesta].
Los orígenes de una carrera ilustre en las apuestas
Lógicamente, estaba deseando averiguar cómo comenzó su ilustre carrera en el mundo de las apuestas.
Lewis quiere dejar claro que no es un experto de las estadísticas. Estudió Literatura inglesa en Oxford y cuenta con conocimientos básicos de aritmética, pero posee una capacidad intuitiva para determinar el valor, lo que es claramente un eufemismo.
“Siempre me ha gustado apostar y soy aficionado a los deportes, pero me adentré en el mundo de las apuestas reales a través del póquer: en aquella época, el tradicional. Un jugador de póquer amigo se ofreció a introducirme [ríe irónicamente] en el backgammon a 10 $ el punto. La suerte quiso que, al estilo de «Rainman», sintiera una aptitud natural y me pareciera obvio lo que tenía que hacer durante la partida”.
El backgammon se basa en juegos de más de 5.000 años de antigüedad. Se trata de una combinación de habilidad y suerte, en la que los dos dados juegan su parte. En esencia, cualquiera de los jugadores tiene la oportunidad de doblar las apuestas en cualquier momento. Si el oponente no acepta, el juego termina (Abandonar) con la apuesta inicial. Cuando sacas el mismo valor en los dos dados tienes un doble y, por tanto, el derecho a ofrecer la siguiente apuesta doble. Las apuestas se pueden doblar una y otra vez de forma ilimitada. La clave consiste en comprender en qué circunstancias Aceptar y cuándo Abandonar, y esta decisión es esencialmente una estimación de valor, como en cualquier otra apuesta. ¿Cuál de las dos opciones funcionará mejor? No debe sorprendernos que los apostantes más astutos sean excelentes jugadores de backgammon, y viceversa.
“El backgammon es un juego de apuestas al 100%. Es como el póquer. La gente puede volverse loca doblando y volviendo a doblar. Lo que intento explicar es que atrae a un enorme número de apostantes profesionales. Llegué a conocer a muchas de estas personas durante mi carrera como director de torneos de backgammon, y pagué unos 40 millones de $ en premios [derivados de las cuotas de entrada].
A pesar de las cifras implicadas, todo el mundo recibió su pago y me hice con una sólida reputación. Por tanto, los apostantes de todo el mundo tenían la seguridad de que podían confiar en mí”.
En la misma medida que Lewis es un apostante experto y antiguo subcampeón del Campeonato mundial de backgammon, es un narrador con un tono de voz seductor que sutilmente ofrece pistas de hacia dónde te guiará un hilo. Sin embargo, cuando se le insiste en el consejo que daría a un aspirante a apostante, es muy directo.
El consejo más importante para cualquier apostante
“Tengo un consejo para cualquier persona que lea esto que es más importante que el resto de este artículo en su totalidad. No apuestes dinero que no te puedas permitir perder. Pierdes el juicio y te sometes a una presión intolerable. Si tuviera que hacer llegar diez mensajes a tus lectores, todos dirían lo mismo. ¡Si solo buscas dinero a corto plazo, nunca ganarás!”
No es coincidencia que uno de los Artículos sobre apuestas más populares de Pinnacle0 no se centre en el hándicap sino en gestionar el riesgo.
“Aprendí esa lección en mis primeros días como apostante a Chemin de Fer [una versión de Baccarat]”, dice Lewis sonriendo al recordar esta amarga lección, “cuando perdí el importe íntegro de la beca para mi primer semestre en la universidad incluso antes de poner un pie en el campus”.
Reflexionando sobre el cambio
Pregunté a Lewis en qué medida ha cambiado el sector de las apuestas en los años que lleva en él.
“Con frecuencia [en el pasado] era simplemente cuestión de conseguir información. [Hoy en día] La información se transmite por Internet muy deprisa”.
Para subrayar esta asimetría de los precios, cuenta una anécdota de un viaje a Austria.
“Cuando empezaron las apuestas deportivas en Austria, estuve buscando algunos precios en Internet. Su hándicap de tenis era terrible: había valor en abundancia. Así que viajé a Viena para abrir varias cuentas, y en el primer lugar (en una calle llamada Artillerie Strasse) me acerqué al mostrador con el deseo de abrir una cuenta de crédito.
«Herr Deyong» me dijo el director.
«¿Nos conocemos?»
«El año pasado gané el Junior Consolation en Montecarlo!».
Es difícil mantener el anonimato cuando se te conoce por encontrar valor.
“Tengo un consejo para todos los que lean esto. No apuestes dinero que no te puedas permitir perder”.
Su posición en el mundo del backgammon le puede haber convertido en un rostro conocido y haberle abierto muchas puertas, pero su éxito dentro de las apuestas profesionales se debió a haber denunciado de forma sistemática la ineficacia del mercado en los días en que las casas de apuestas todavía pensaban localmente.
“En aquellos tiempos resultaba beneficioso madrugar y llamar a Australia para comprobar los precios; por alguna razón casi todas las casas de apuestas guardaban sus números como un secreto de estado y, por supuesto, no existía Internet”.
“Tenía buen conocimiento del tenis y, poco a poco, se convirtió en algo más que una afición” haciendo alusión a la escala de las apuestas implicadas. Lewis relata cómo iba a usar las cuentas de teléfono a su favor mientras recorría el mundo de un extremo a otro realizando apuestas importantes en múltiples casas de apuestas en toda Europa, en Austria y en el Reino Unido, consiguiendo lo que se denomina “una intermedia”, que es una posición sin riesgo en ambos lados de una apuesta, hasta tres veces al día.
“[Aquella época] Era un auténtico paraíso. Podías obtener un sólido favorito recuperando el dinero apostado y un no favorito en vivo que podía estar a 5/2 por algo así como 12/1”.
Sencillamente, eso no puede ocurrir en la actualidad ya que las API permiten una comunicación instantánea de las cuotas y la comunicación digital permite que se comparta información al momento.
Otra consecuencia de la disponibilidad total de las cuotas, al contrario que en la época que narra Lewis, es que cuando hay Intermedias y Arbitraje disponibles posiblemente sea durante periodos muy cortos de tiempo. Las casas de apuestas también han echado el freno por lo que, personalmente, le resulta mucho más difícil apostar de la misma manera hoy en día.
Pregunté a Lewis si cree que el ruido de la información interna, por ejemplo, en las redes sociales, está poniendo las cosas más difíciles para los apostantes.
“Ha cambiado por completo las apuestas pero el único lugar en el que el ruido no tiene efecto es en los precios [cuotas]”
Al igual que en el backgammon, Lewis relata que organizaba y competía en eventos de tenis Pro-Am en la década de 1970 que le brindaron acceso privilegiado a los jugadores (esta era su propia versión de un círculo de redes sociales), recitando nombres de algunos de los mejores jugadores de la época. Al ser zurdo, estaba especialmente bien dotado para los partidos de dobles, lo que le permitió tener tanto éxito en la cancha como en el campo de las apuestas.
Cuando Wimbledon entró en escena, Lewis pudo sacar provecho de esas relaciones, aprendiendo más acerca del juego y obteniendo importantes perlas de información (algo que no se ha oído desde hace muchos años) e incluso organizó un evento Pro-Am en Queens para los mejores y más grandes patrocinado por el legendario magnate de los casinos y ecologista John Aspinall.
Sin embargo, las cosas no siempre salen según lo previsto.
“Recuerdo que una de mis peores pérdidas fue con un jugador estadounidense altísimo llamado Sherwood Stewart en Wimbledon contra su compatriota, Mike Estep. No podía entender por qué este jugador de casi 1,90 de altura especialista en saques y voleas sobre hierba estaba perdiendo contra un norteamericano especialista en tierra batida y diminuto, al que sacaba más de 15 cm.
Lewis descubrió posteriormente que ambos se habían criado en la misma ciudad de Texas y se conocían muy bien.
“Cuando juegan amigos íntimos, la dinámica entre ellos cambia espectacularmente”, añadió con tono serio.
Esto parece cierto hoy en día, llevado a los extremos en los partidos entre las hermanas Williams, para quienes resulta muy difícil calcular el hándicap por esa misma razón. Por supuesto, hoy en día ese tipo de información estaría disponible a un solo clic o toque de pantalla, un claro ejemplo de cómo ha cambiado el panorama de la información, pero no siempre para mejor.
A Lewis se le atribuye una famosa cita: “los atletas profesionales son los peores a la hora de calcular el hándicap de su deporte”, una idea que sigue manteniendo. Cree que esto se extiende a los que denomina «cuasi-expertos» que comentan deportes, apelando a un mercado de masas en gran medida desinformado. Esa cita iba acompañada de una advertencia para los apostantes para que se alejen de esa clase de erudición. [Para leer más sobre el tema, consulta la Falacia del madero verde].
La cuestión de la especialización
La carrera de Lewis se ha centrado en dos deportes en particular, el fútbol americano y el tenis, de los cuales ha obtenido un profundo conocimiento, jugando al tenis toda su vida.
En los primeros días de las cadenas de televisión especializadas en deportes, apareció como experto interno frente a la cámara en el primer programa de la NFL en el Reino Unido: Screen Sport. Lamentablemente, a pesar de unas cifras de audiencia muy alentadoras, su carrera televisiva quedó interrumpida por exigencias poco razonables [y un tanto extrañas] de la productora.
“¿Te lo puedes creer? Me pidieron que llevara un peluquín para estar más en la onda de su público joven. Era simplemente inaceptable”.
Admite abiertamente que apuesta en otros deportes “como aficionado”, haciendo hincapié en que la especialización es vital para el éxito, sobre todo en deportes binarios.
Lewis también fue claro acerca de la importancia de que los apostantes se especialicen, y en que el valor no se encuentra en la Super Bowl ni en la Final masculina de Wimbledon, donde las casas de apuestas hacen negocio siendo muy correctos al fijar sus precios y donde toda la información relevante está ampliamente disponible y sujeta a escrutinio.
Admite abiertamente que apuesta en otros deportes “como aficionado”, haciendo hincapié en que la especialización es vital para el éxito, sobre todo en deportes binarios.
El interés y, por tanto el volumen, es mayor en los eventos más populares, de manera que el mercado alcanza la eficiencia mucho más rápido y elimina el valor.
Como si quisiera reforzar ese punto, Lewis explica que sigue apostando regularmente durante a temporada de la NFL, y tiene un límite elevadísimo en una conocida casa de apuestas de la competencia, pero con una restricción clave: solo puede empezar a apostar una hora antes del inicio del partido.
“Puedes tener una gran opinión, pero no tendrás valor. El valor se encuentra en las primeras rondas de tenis y en las ligas inferiores de fútbol, e invariablemente con el no favorito”.
Lewis añadió que junto con los eventos de marca, los apostantes serios eluden los equipos “públicos”. En este punto, se le escapa una risita.
“Todo el mundo quiere bailar con la chica guapa, así que busca a las hermanas feas, porque lo más probable es que estén infravaloradas.
Si los chicos listos van a apostar al favorito, apuestan pronto, y apuestan al no favorito tarde retirando el dinero ganado desde la butaca en el favorito, con lo que obtienen puntos gratis”.
La atención que ha centrado toda su vida en los deportes binarios no es una coincidencia. En opinión de Lewis, los mercados de tres vías, es decir, donde el empate es un resultado realista, como el críquet o el fútbol, son un sueño para las casas de apuestas. (No obstante, hay que señalar que en los últimos años las apuestas sin empate se han introducido como opción).
Igualmente, cree que los mercados de derivados, al igual que las apuestas de sets, deberían ser para expertos, porque cada vez es más difícil añadir valor con tantas variables que elevan los márgenes (que un apostante debe superar) mucho más arriba.
Apuestas: del arte a la ciencia
Sus antecedentes en el backgammon junto con su conocimiento del juego le permitieron tener “un mejor concepto de lo que deberían ser las cuotas que el de aquellos que fijan las cuotas en eventos como Wimbledon”. Cuando descubrió que era capaz de encontrar este valor en un entorno cerrado, pasó a estar en una posición muy fuerte.
Sin embargo, actualmente apuesta cada vez menos en tenis.
“Ahora compito con personas que no saben más que yo de tenis (si saben tanto), pero que tienen conocimientos matemáticos y pueden analizar datos de una forma profesional, algo que yo no puedo hacer. Y, tristemente, debo aceptar que ahora las apuestas tienen más de ciencia que de arte”.
En pocas palabras eso puede resumir perfectamente el cambio en las apuestas que un experto veterano como Lewis ha experimentando en los últimos 50 años.
El componente del apostante profesional que se basa en tener mucha experiencia ha quedado anulado por aquellos que sencillamente hacen cálculos numéricos. Puede que las apuestas hayan dejado de ser un arte para ser una ciencia, pero ha sido magnífico pasar tiempo con alguien que aprecia esa diferencia.
Epílogo
A la hora de dar a nuestros lectores algunos consejos prácticos, que perdurarán con independencia del análisis de datos que se utilice, Lewis comentó los siguientes:
(I) Para encontrar un equipo de la NFL infravalorado, fíjate en la línea ofensiva. Andrew Luck es considerado el joven quarterback con más talento y acabará por sustituir al ya fallecido Peyton Manning como n.º 1. Sin embargo, hasta el momento no ha sido capaz de aprovechar todo su potencial porque su línea ofensiva es abismal. Los Colts deberían hacer de esta su prioridad n.º1 en el draft y la agencia libre. Si su equipo consigue mejorar realmente en este punto, no tendrá límites.
Recuerda que no es difícil encontrar running backs y wide receivers con un talento excepcional, pero las líneas ofensivas de nivel profesional son como grandes agujas en pajares enormes. DALLAS 2015/Carolina 2016, son ejemplos destacados de esta teoría.
(II) A pesar de los grandes cambios realizados en la composición de la hierba, Wimbledon sigue siendo una pista para el jugador que tiene el servicio. Creo que en individuales masculinos (y femeninos) es un 5 % superior en hierba que en pista dura, y en masculinos se mantiene en torno al 85 %. Esas cifras de servicio tan relativas también se dan en el torneo femenino.
En 2015 se dio un ejemplo perfecto. Coco Vandeweghe es una fornida joven norteamericana con un servicio brutal. Sin embargo, con 24 años, ha demostrado poco, a excepción de un título en un torneo jugado naturalmente en pista de hierba (en Holanda en 2014). Incluso así, en el torneo de Wimbledon de 2015 derrotó a tres aspirantes (incluida Safarova, la finalista de Roland Garros favorita a priori) y ganó un set a Sharapova en cuartos. ¡Caballos ganadores! Un análisis tan subjetivo seguirá dando resultados si realmente dedicas tiempo y estudias tu deporte.
Recuerda que la casas de apuestas siempre tienen que tener en cuenta la opinión pública (no el conocimiento público) probablemente como su parámetro más importante, pero tú no.
*La entrevista tuvo lugar en enero de 2016