Todas las casas de apuestas aplican un margen a sus cuotas de apuesta para asegurarse de obtener beneficios. Para hacerlo, reducen las cuotas en comparación con la expectativa justa asociada con cada resultado. En un partido entre dos jugadores, por ejemplo, en el que la cuota para la victoria del jugador A es “a” y la cuota para la victoria del jugador B es “b”, el margen se calcula de esta manera:
Margen = [(1/a) + (1/b)] x 100%
Si desea consultar información más detallada, visite ¿Cómo calcular los márgenes de las apuestas? En el caso de una apuesta justa, este total siempre será el 100%, dado que es un reflejo de la suma de las probabilidades de todos los resultados posibles. En el caso de la apuestas de una casa de apuestas, el total siempre será superior al 100%. El exceso se conoce como comisión, retención o porcentaje. Lo que resulta menos claro es cómo distribuyen las casas de apuestas sus márgenes: ¿todo al jugador A, todo al jugador B o repartido a partes iguales entre ambos jugadores (A y B)?
Cómo se añade el margen a las cuotas
El sentido común dictaría que la mejor forma de gestionar los pasivos sería repartir el margen equitativamente entre cada jugador. Por ejemplo, si dos jugadores están emparejados equitativamente, sus cuotas justas son 2,00. Al aplicar un margen del 2,5% equitativamente para cada jugador sus cuotas se reducirían a 1,95.
En un partido entre dos jugadores en el que la cuota para la victoria del jugador A es “a” y la cuota para la victoria del jugador B es “b”, el margen se calcula de esta manera: Margen = [(1/a) + (1/b)] x 100%
¿Pero qué sucede en las competiciones en las que hay claros favoritos y víctimas, por ejemplo con cuotas de apuesta de 1,20 y 6,00? Una distribución uniforme del margen haría que las cuotas se redujeran a 1,17 y 5,85, respectivamente. Sin embargo, esto no es lo que sucede habitualmente.
En lugar de eso, es más probable que nos encontremos con cuotas similares a 1,19 y 5,41. La cuota de la víctima se ha reducido mucho más que la cuota del favorito. Desde el punto de vista del porcentaje del margen, la víctima tiene un margen del 11%, mientras que el favorito tiene un margen de tan solo el 1%. ¿Por qué ocurre esto? La explicación nos la suele ofrecer lo que se conoce como sesgo improbable favorito.
Ejemplos de sesgo improbable favorito
En el mundo de las apuestas deportivas ahora hay pruebas considerables que demuestran que los improbables son desproporcionadamente más reducidos en comparación con los precios justos que los favoritos, como sucede en las carreras de caballos, fútbol, tenis y otros deportes minoritarios.
Un artículo de 1997 de Leighton Vaughan Williams y David Paton, de la Business School de la Universidad de Nottingham, publicado en The Economic Journal, encontró un fuerte sesgo improbable favorito en una muestra de 4.689 caballos en 481 carreras durante la temporada de 1992 de carreras de caballos en llano del Reino Unido.
Las apuestas a favor de caballos con cuotas inferiores al dinero parejo (2,00) sufrieron pérdidas de tan solo el 7%. Por el contrario, las apuestas a favor de los improbables a más de 40/1 perdieron más del 40%. Un artículo de Michael Cain, David Law y David Peel publicado en el Scottish Journal of Political Economy en el año 2000 descubrió pruebas claras de sesgo improbable favorito en una muestra de partidos de fútbol de las ligas inglesa y escocesa jugados durante la temporada 1991/92, con pérdidas de tan solo el 2% al apostar a cuotas inferiores a 1,66, en comparación con las pérdidas del 15% al apostar a cuotas superiores a 5,00.
También he citado pruebas más recientes de este sesgo en apuestas de fútbol en partidos de ligas europeas en mi último libro: Squares and Sharps, Suckers and Sharks: The Science, Psychology & Philosophy of Gambling.
Asimismo, podemos observar este sesgo en el mercado de apuestas de partidos de tenis de Pinnacle. La siguiente tabla muestra los beneficios teóricos de apuestas con el mismo importe para las cuotas de cierre de partidos de la ATP y la WTA jugados entre 2011 y 2015 (excluyendo los partidos con victorias fáciles y abandonos). El margen normal de Pinnacle para las cuotas de partidos de tenis es de tan solo el 2,4%.
Expectativa de victoria |
Apuestas |
Beneficios |
Del 91 al 100% |
2.574 |
-0,46% |
Del 81 al 90% |
3.828 |
0,55% |
Del 71 al 80% |
5.819 |
0,08% |
Del 61 al 70% |
6.698 |
-2,53% |
Del 51 al 60% |
5.996 |
-3,03% |
Del 41 al 50% |
6.334 |
-3,05% |
Del 31 al 40% |
6.558 |
-2,28% |
Del 21 al 30% |
5.423 |
-10,09% |
Del 11 al 20% |
3.634 |
-15,43% |
Del 0 al 10% |
1.760 |
-22,45% |
Las 1.760 apuestas descubiertas a cuotas de 10 o superiores habrían tenido pérdidas superiores al 20%. En cambio, apostar a cuotas inferiores a aproximadamente 1,4 habría supuesto una pérdida casi inexistente para el apostante.
Normalmente, las casas de apuestas con mayores márgenes tienes sesgos más fuertes, ya que distribuyen el margen extra principalmente en la víctima. Por ejemplo, cuando Djokovic jugó contra Coric en la segunda ronda del Masters de Madrid 2016, Pinnacle ofreció cuotas para los jugadores de 1,06 y 13,00, respectivamente. En cambio, la casa de apuestas Interwetten, con un margen mucho mayor, ofreció cuotas de 1,05 y 8,00. Obviamente, la principal diferencia entre las dos apuestas se encuentra en el improbable.
Apostar a favor de lo improbable
Se han sugerido numerosas explicaciones de la existencia del sesgo improbable favorito, incluyendo las respuestas de las casas de apuestas ante la información privilegiada y el juicio erróneo de las probabilidades altas y bajas predichas por los efectos de posibilidad y certidumbre.
Normalmente, las casas de apuestas con mayores márgenes tienes sesgos más fuertes, ya que distribuyen el margen extra principalmente en la víctima.
En estos casos, se considera que los apostantes expresan la utilidad de buscar el riesgo con lo improbable mientras que expresan una aversión al riesgo con los favoritos, así como que las ponderaciones de probabilidad no lineal que aplican en la formulación de estas preferencias de utilidad específicas surgen de percepciones equivocadas de las probabilidades implicadas. Descrito de esta manera, el sesgo improbable favorito representa simplemente un típico sesgo cognitivo.
Cuando los apostantes apuestan en exceso a favor de lo improbable, la consecuencia es que las casas de apuestas deben reducir sus cuotas para ayudar a gestionar los pasivos, aunque David McDonald y sus compañeros del Centre for Risk de la Universidad de Southampton han sugerido que las casas de apuestas explotan intencionadamente las preferencias sesgadas de los apostantes en lugar de reaccionar ante ellas.
Dado que la mayoría de apostantes hacen juicios imprecisos, sobre todo respecto a los improbables, las casas de apuestas reducirán enormemente esas cuotas, sencillamente porque pueden hacerlo. Por el contrario, la elasticidad de la demanda de los apostantes en cuanto a los favoritos es mucho mayor, de ahí la gama mucho menos amplia de cuotas para los favoritos entre las casas de apuestas con márgenes diferentes. Por tanto, si está interesado en obtener un beneficio a largo plazo apostando sobre todo a favor de los no favoritos, asegúrese de pagar un valor justo al hacerlo.
Pinnacle Sport se enorgullece de ofrecer los márgenes más competitivos del mercado. En el caso de los principales eventos futbolísticos, como la Eurocopa, se sitúan alrededor del 2% en comparación con el 6% de la media del sector, lo que significa que usted gana más en cada apuesta.